Os pongo una breve explicación de qué efectos tienen los colores en nosotros. Os deseo un finde de "la vie en rose"
Las personas experimentan y sienten los colores además de verlos. Según la cromoterapia, los colores se dividen en activos, pasivos y neutros.
Los activos o cálidos como ser el rojo, el amarillo y el naranja, despiertan sensaciones positivas y alegres de confianza o extroversión. Una pared brillante recrea una atmósfera acogedora y cálida, perfecta para habitaciones oscuras.
El amarillo, por ejemplo, se emplea en espacios que no están asociados con la alegría, como ser en clínicas o lavaderos. Para las oficinas y salas de lectura son recomendables todas las gamas del amarillo e inclusive el dorado, porque motivan al trabajo y la creatividad.
Los colores pasivos o llamados fríos son el azul, el verde y los púrpura, que dan sensación de paz, frescura y amplitud, ideales para los dormitorios, baños y espacios de privacidad. Una pared pintada con colores fríos genera calma y bienestar en una habitación donde ingresa demasiada luz solar y calor.
Las versiones más claras de los fríos son delicadas y dan sensación de soledad y esperanza.
En las salas de juego o de actividad lo mejor será emplear el celeste o los verdes claros, mientras que las variedades más oscuras de colores fríos como los verdes apagados o el azul marino pueden originar tristeza y hasta pesadez.
El blanco, los grises y los naturales son los colores neutrales que si bien no activan de manera intensa ninguna sensación, son excelentes pares de los demás porque facilitan la transición o la unión entre los colores.
Para comenzar a emplear los principios de la cromoterapia, puedes aplicarlos sólo en algunos objetos o muebles sin tener que pintar toda la casa de colores diferentes a los que tiene.
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